Que no venga lo de ayer

¿Han tenido la sensación de que de pronto el mundo es muchísimo más infinito de lo que jamás se hubieran imaginado?

¿Han pensado que tan sólo en un mundito con 5 personas, los pensamientos, historias, palabras, risas, encantos y demás sustantivos alegres, podría ser suficiente para tener un infinito de relaciones? (No sexuales, cochinos)

Y una de las ideas que en definitiva me causan un estupor, es la de lo infinito. El universo, el mal, los blogs, la mente, son cosas que de sólo imaginarlas, me erizan de forma obscena.

A pesar de eso, algo que aprendí en mi última relación es que hay cosas que sabía inconscientemente, pero que me aterraba enfrentar. Una de ellas era el cúmulo de miedos infundados, la parálisis emocional que puedo llegar a sufrir y la incapacidad en ocasiones para cambiar cosas que PUEDO cambiar.

Un consejo, si un día van a Honduras y les gritan "león" o "tamarindo", podrían sufrir, de forma casi segura, una sodomización poco grata. Si algún día van a Honduras, no pierdan la oportunidad de llamarle a alguien "Ninfo" y pasar por la misma sodomización innecesaria.

Si buscan la palabra "Sodomización" en el fabuloso google, se darán cuenta de la impactante historia de una mujer que sodomizó a su marido, lo curioso del asunto es que Maytet se encuentra consternada debido a que le provocó sangrado anal a su marido y éste no quiere ir al doctor por motivos no tan ocultos, él está rasurado y tiene azotes en las nalgas.

Si van a Bolivia, que no los llamen "Maracos".

Pero hablaba de la inmensidad, creo que no es tanto el concepto y la sensación como el hecho de saber que descubres que hay muchísimo más, como la historia del hombre en la caverna que vio la luz y salió a investigar y así.

Yo soy un hombre en una caverna. Una en donde no hay cosas que robar, pero si un hilo conductor hacía Fendi, código html, herramientas webmaster, películas en línea y documentales gay.

Creo que es un buen momento para confesar que estoy sufriendo la locura de vacaciones. En el pasado periodo de asueto decembril, mi locura causó el rompimiento de mi muy bella e imaginaria relación (las vacaciones ocasionan eso a mis relaciones, pd: no más queveres con niños)... aunque también ayudó mucho que el pequeño noviecillo de diciembre conociera a otro chicuelo... y que luego yo conociera a ese chicuelo y pasara a ser mi más reciente relación fallida... PD: NO MAS QUEVERES CON NIÑOS.

Tengo unas ganas inmensas de ir al zoológico de Chapultepec, así que si alguien se apunta, yo gustoso le daré la información correspondiente para la cita y hacernos mutua compañía.

Si van a Venezuela, procuren no ser ofendidos al ser llamados "Come Chuzos", ahora siento una morbosa curiosidad por averiguar que es un chuzo.

Por cierto, y antes de que esta información sea irrelevante y perecedera, se ha abierto un nuevo blog de música de todo tipo, actualmente es proporcionada por Toñiño y yo, pero si alguien de igual manera decide animarse y echarnos recomendaciones o incluso aventurarse a volverse autor amigo del blog, pues adelante. Les dejo la dirección para que vean, aunque está empezando: Reformusique

Un chuzo es un arma.

"El amor ha muerto, hoy tenemos recuerdos, falsedades y aferraciones. Temores a la soledad, a no cumplir el ideal de vida, a la amargura, a que nadie nos salve y a no resguardar a nadie.
Si aprendes que el único con el que vas a vivir toda tu vida eres tú y que eventualmente tendrás la excelente compañia de alguien, las cosas se vuelven más sencillas, no hay que sufrir si no se tiene amor/aprobación de alguien más, si se pierde, si fallece, si se extraña, si se engaña, todo es un gasto emocinal irracional y bastante innecesario. Lo único con lo que cuentas eres tú y la mayoría de las veces estarás traicionándote, voicoteándote, apapachándote y sacándote a pasear." ¿Será?

Creo que ya no me quiero imaginar la vida con los ojos que solía verla, porque hacerlo sería una reverenda... ¿qué? Después de todo si alguien puede juzgar mi vida, soy yo mismo.
Me sigue impresionando la manera en la que se pueden sufrir transformaciones sin la necesidad siquiera de moverse.